Cova del Volcán del Faro. Cullera. 1971
23-08-197120-11-1971José Aparicio Pérez
Entre agosto y noviembre de 1971, se llevó a cabo la cuarta campaña de excavaciones en este importante yacimiento paleolítico valenciano. Se continuó excavando en el sector A, dedicándose gran parte del tiempo a la rotura y extracción de grandes bloques de piedra desprendidos de la bóveda del abrigo que, cubriendo en parte la superficie excavable dificultaban en gran manera los trabajos. La profundidad alcanzada durante esta campaña ha alcanzado los tres metros y medio en algunos puntos, con respecto al nivel de las tierras superficiales.
La coloración y la contextura de las tierras es semejante a las capas anteriores, levantándose las capas hasta la 24, ha disminuido la intensidad del hogar, tanto en extensión como en cantidad de tierras negras, cenizas y carbones, desplazándose hacia el talud del Sureste. El material lítico y óseo ha sufrido una evidente disminución cuantitativa, aun cuando sigue manteniendo su calidad, habiendo aparecido algunas piezas de excelente trabajo. La fauna sigue el mismo camino que el material lítico: poca cantidad y por lo general de animales pequeños (conejo), aunque se dan algunos ejemplares de ciervo y grandes herbívoros. Provisionalmente se han situado estos materiales en un Magdaleniense medio.
(La Labor del Servicio de Investigación Prehistórica y su Museo en el pasado año,1973, p. 97-98).
La coloración y la contextura de las tierras es semejante a las capas anteriores, levantándose las capas hasta la 24, ha disminuido la intensidad del hogar, tanto en extensión como en cantidad de tierras negras, cenizas y carbones, desplazándose hacia el talud del Sureste. El material lítico y óseo ha sufrido una evidente disminución cuantitativa, aun cuando sigue manteniendo su calidad, habiendo aparecido algunas piezas de excelente trabajo. La fauna sigue el mismo camino que el material lítico: poca cantidad y por lo general de animales pequeños (conejo), aunque se dan algunos ejemplares de ciervo y grandes herbívoros. Provisionalmente se han situado estos materiales en un Magdaleniense medio.
(La Labor del Servicio de Investigación Prehistórica y su Museo en el pasado año,1973, p. 97-98).