Cueva de la Cocina

En 1940 unas profesoras de instrucción primaria comunicaron a D. J. Senent lbáñez la existencia de pinturas rupestres en la sierra de Dos-Aguas, sitios denominados «Cinto de la Ventana» y «Cinto de los Letreros», ya conocidas por la gente del país; y dada noticia al Servicio, organizamos una visita de reconocimiento, y allá fueron D. José Chocomeli, D. José Senet y el capataz Espí, primero, y en el verano de 1941, D. Juan Cabré, acompañado de los mismos, y de D. Luis Pericot y de D. J. Alcácer, todos en viaje de estudios a aquéllas, tomándose notas y calcos de las pinturas principales por el Sr. Cabré, encargado de realizar el trabajo, quien por sus ocupaciones primero, y su falta de salud después, no pudo llevarlo a cabo. En tales viajes, y conforme a las normas del S. I. P., exploráronse los alrededores de las pinturas, y así se descubrió la cueva llamada de la «Cocina>>; gran oquedad, con rico yacimiento epipaleolítico al que se superpone un estrato neolítico antiguo. Comenzó a excavarse en 1941 y se ha continuado en campañas de 1942, 1943 y 1945 por una comisión del Servicio, dirigida por L. Pericot auxiliado por Alcácer, Pla y Jordá, con el capataz Espí, y el resultado de tal exploración, no terminada ciertamente, se recoge en el estudio de Pericot titulado «La Cueva de la Cocina>> (Archivo II), según el que parecen apreciarse con firmeza los tres siguientes niveles: 1.º, neolítico antiguo; 2.º, pleno desarrollo microlítico; y un 3.º, de mayor arcaísmo, aunque continúe el predominio de las puntas microlíticas.

(La Labor del SIP y su Museo en el pasado año, 1949; 17-18)