Llometa de Cabrera. 1931
09-04-193125-05-1931Gonzalo Viñes Masip
Se hallaban los restos de este pequeño despoblado en el extremo oeste del Vedat de Torrente, y su perfil, visto desde el norte de la llanada inmediata, era el de una masa tumular, aislada de la loma por un pequeño collado.
Trátase de un pequeño caserío, más que poblado, implantado en forma semejante a todos los de igual periodo que se encuentran en las sierras levantinas. Un foso con torre o muralla le defendía por el lugar accesible, o sea por el collado inmediato. La muralla era tan fuerte y ancha, en dicho punto, que le permitía contener en su macizo un pequeño departamento, que tal vez sirviera para alojar guardia o centinela. Como en otros poblados almerienses se notaban en éste algunos hoyos de cenizas, huellas de estacas o de pies de madera quemados, observándose que el despoblado debió ser incendiado y reedificado luego. De las habitaciones y otros detalles del poblado, como sospechábase por lo removido del yacimiento, casi nada pudo saberse.
Entre los materiales cerámicos recuperados encontramos gran cantidad de piezas a mano, sin decoración como "algunos vasos reconstruibles de formas ovoideas, con iniciación del cuello, cazuelas, cuencas en forma de casquetes, y vasos de mediano y pequeño tamaño de perfil reentrante en su mitad superior, y buena porción de dos piezas troncocónicas, abiertas por ambos extremos agujereadas en criba, supuestas escurrideras de queso; y otro vaso de barro de color claro y perfil reentrante en su mitad superior, ornamentado en dicha zona con varias franjas de series de líneas de puntos, a las que se unen grupos de semicírculos concéntricos.
Además se hallaron útiles de piedra como "una pequeña azuela de fibrolita; sierras de pedernal pequeñas y grandes. Cuchillos sin retoques. Piedras de moler activas y pasivas, éstas generalmente de perfil elipsoidal. Un alisador de piedra. Una pieza de pizarra, rectangular alargada, rota por un extremo y que en el otro lleva un taladro"; objetos metálicos como "cuatro puntas de flecha de cobre (...), y una que, por su mayor tamaño, estimamos de jabalina, siendo todas del perfil aproximadamente foliáceo con la espiga muy acusada, salvo una en que se desarrollan, pronunciadamente las aletas. Una laminilla de bordes paralelos, que parece resto de cuchilla. Un punzón y varios fragmentos de otros"; restos de útiles de dura madera algunos de los cuales parecían "afectados por el fuego"; "un poco de trigo y gran cantidad de bellotas, todo carbonizado"; "trozos de haces de fibras unidas por otros, todo carbonizado y de naturaleza indeterminable", en el fondo de un vaso; punzones y una lámina "con los bordes cortantes, que recuerdan un cuchillo" de hueso; así como, abundantes conchas de pedúnculo y "alguna de ciprea".
Finalizando los trabajos de exploración del poblado, dispuso la Dirección se excavara una cuevecita inmediata, comprobándose que había sido ya removido el yacimiento por los cazadores de conejos, encontrándose fragmentos de huesos humanos, un cráneo humano completo y un colgante elipsoidal de concha.
Al frente de las excavaciones estuvo el colaborador del Servicio D. Mariano Jornet, quien levantó el plano de lo excavado.
(La labor del Servicio de Investigación Prehistórica y su Museo en el pasado 1931: 18-22)
Trátase de un pequeño caserío, más que poblado, implantado en forma semejante a todos los de igual periodo que se encuentran en las sierras levantinas. Un foso con torre o muralla le defendía por el lugar accesible, o sea por el collado inmediato. La muralla era tan fuerte y ancha, en dicho punto, que le permitía contener en su macizo un pequeño departamento, que tal vez sirviera para alojar guardia o centinela. Como en otros poblados almerienses se notaban en éste algunos hoyos de cenizas, huellas de estacas o de pies de madera quemados, observándose que el despoblado debió ser incendiado y reedificado luego. De las habitaciones y otros detalles del poblado, como sospechábase por lo removido del yacimiento, casi nada pudo saberse.
Entre los materiales cerámicos recuperados encontramos gran cantidad de piezas a mano, sin decoración como "algunos vasos reconstruibles de formas ovoideas, con iniciación del cuello, cazuelas, cuencas en forma de casquetes, y vasos de mediano y pequeño tamaño de perfil reentrante en su mitad superior, y buena porción de dos piezas troncocónicas, abiertas por ambos extremos agujereadas en criba, supuestas escurrideras de queso; y otro vaso de barro de color claro y perfil reentrante en su mitad superior, ornamentado en dicha zona con varias franjas de series de líneas de puntos, a las que se unen grupos de semicírculos concéntricos.
Además se hallaron útiles de piedra como "una pequeña azuela de fibrolita; sierras de pedernal pequeñas y grandes. Cuchillos sin retoques. Piedras de moler activas y pasivas, éstas generalmente de perfil elipsoidal. Un alisador de piedra. Una pieza de pizarra, rectangular alargada, rota por un extremo y que en el otro lleva un taladro"; objetos metálicos como "cuatro puntas de flecha de cobre (...), y una que, por su mayor tamaño, estimamos de jabalina, siendo todas del perfil aproximadamente foliáceo con la espiga muy acusada, salvo una en que se desarrollan, pronunciadamente las aletas. Una laminilla de bordes paralelos, que parece resto de cuchilla. Un punzón y varios fragmentos de otros"; restos de útiles de dura madera algunos de los cuales parecían "afectados por el fuego"; "un poco de trigo y gran cantidad de bellotas, todo carbonizado"; "trozos de haces de fibras unidas por otros, todo carbonizado y de naturaleza indeterminable", en el fondo de un vaso; punzones y una lámina "con los bordes cortantes, que recuerdan un cuchillo" de hueso; así como, abundantes conchas de pedúnculo y "alguna de ciprea".
Finalizando los trabajos de exploración del poblado, dispuso la Dirección se excavara una cuevecita inmediata, comprobándose que había sido ya removido el yacimiento por los cazadores de conejos, encontrándose fragmentos de huesos humanos, un cráneo humano completo y un colgante elipsoidal de concha.
Al frente de las excavaciones estuvo el colaborador del Servicio D. Mariano Jornet, quien levantó el plano de lo excavado.
(La labor del Servicio de Investigación Prehistórica y su Museo en el pasado 1931: 18-22)